Coca de Trampó Mallorquina

Uhmmm... que rica!!!!!

Nunca había preparado una Coca de Trampó y eso que me encanta. Empecé a degustarlas. Horno por el que pasaba, compraba una, les ponía nota, y esto se convirtió en una diversión. Con el tiempo, me convertí en una experta catadora de Cocas. Les solía sacar pegas, sobre todo, porque me gustaban los extremos pero la parte central solía quedarse muy empapada en aceite y como consecuencia la masa se quedaba blanda. Y esto obviamente,  era el motivo fundamental, para suspender. Y así me pasé años degustando  cocas de todos los hornos de pueblos de Mallorca y de Palma. Me volví exigente y fue cuando decidí empezar a hacerlas yo. Primero busqué recetas en Internet. Después, cuando hacía la compra en el mercado, empecé a charlar con mujeres mayores mallorquinas a  las que preguntaba consejos y así me fueron descubriendo sus secretos en la elaboración. Estos consejos  los fui aplicando, hasta que conseguí una Coca de Trampó con una alta calificación. Y ya controlándola se las daba a probar a mis amigos, para que me sacaran pegas y así mejorarla. Ahora me encanta mi Coca de Trampó.  Que satisfacción!!! que alegría!!! Ya no volveré nunca a comprar una.